El comandante Chávez, el compañero y amigo, ha entrado definitivamente en la historia. Creo que hombres como Chávez no mueren, se siembran. Bolívar fue un liberador de pueblos y Chávez un liberador de mentes. Uno de los grandes méritos de Hugo fue romper una estructura cultural y mental de muchísimos compatriotas que creían que no era posible otra Venezuela.
Millones fueron alfabetizados, millones que tuvieron por primera vez salud, educación, vivienda, porvenir, ejemplifican la vida y la militancia de Chávez.
Yo no soy quién para mandar mensajes a la oposición venezolana, porque al querer erigirse en mensajero uno se autoasigna una importancia que no tiene. En todo caso, una reflexión para todos los ciudadanos de Venezuela, cualquiera sea su ubicación o su militancia, es que la unidad nacional es lo más importante.
La historia nos demuestra, no sólo a Venezuela sino a todos los pueblos de la región, a todos los pueblos de la UNASUR, del Mercosur, de la CELAC, que cuando los pueblos están desunidos terminan triunfando las minorías, y cuando triunfan las minorías, sufren las grandes mayorías.