Pudimos transformar primero Río Gallegos, pudimos transormar Santa Cruz y transformamos la Argentina. Los convoco a una nueva epopeya, a reconstruir Santa Cruz junto a todos.
Vinimos para lograr un futuro mejor, para progresar. De progreso se trata lo que estamos hablando, de progreso económico, social, pero fundamentalmente progreso moral, anímico.
Hemos transformado la Argentina y ahora hay que acoplar Santa Cruz al proyecto nacional.
Necesitamos que los distintos dirigentes responsables de las organizaciones, también organicen cursos de formación sobre política internacional, sobre historia internacional.
Ustedes se dieron cuenta que prácticamente, salvo cuestiones catastróficas o muy evidentes, parece como que la Argentina fuera un planeta solo en el mundo, que no existiera el resto, porque no hay una sola noticia internacional de nada, de las económicas ni hablemos.
Tenemos que prepararnos, tenemos que saber, porque al que no estudia, al que no sabe lo que pasa y cómo se fueron produciendo los acontecimientos, lo llevan de la nariz. Sobre todo, en un mundo, donde los medios de comunicación y, fundamentalmente también, las redes sociales han adquirido una gran importancia, el problema es la selectividad de la información.