Cena de honor al presidente de la República Popular China, Xi Jinping, en el Museo del Bicentenario de Casa de Gobierno. Viernes, 18 de Julio de 2014.

Muy buenas noches a todos y a todas; estamos dándole hoy, aquí, en este lugar, tan emblemático para nosotros: el Museo del Bicentenario, este espacio histórico, donde tuvo lugar la fundación de la Ciudad de Buenos Aires, darle, una vez más, la bienvenida, en este Museo del Bicentenario, al señor Presidente de la República Popular China, a los miembros de la delegación que lo acompañan, a los señores y señoras empresarias que también forma parte, me atrevería a decir de la comitiva más numerosa y más importante, que ha recibido la República Argentina. Agradecemos porque eso también implica para nosotros una inmensa distinción. También agradecer el recuerdo de nuestra Gesta Emancipadora, en la figura del General San Martín.

Recordaba también usted otro líder argentino, de mi partido, el General Perón y la unión que teníamos cuando éramos muy jóvenes y militantes universitarios, data con China desde aquella época. ¿Por qué? Porque frente a un mundo bipolar el Presidente Perón, desde aquí, desde este lugar, recóndito de la América del Sur y casi en las antípodas del planeta, otro gran líder, el Presidente Mao, planteaban una tercera posición, que no es más ni menos que el derecho de cada pueblo y de cada sociedad a establecer sus propias formas de gobierno, de crecimiento y de desarrollo sin ingerencias externas.

Sobre esta concepción – tal cual lo hemos charlado hoy con el Presidente – de cada pueblo y de cada sociedad de elegir su forma de crecimiento económico y perseverar en el tiempo, además de hacerlo con planificación, es que pivotea, sin lugar a dudas, el surgimiento de lo que algunos denominan el Milagro Chino y que yo me atrevería a decir que no es ningún milagro, es obra de hombres y mujeres que apostaron a su cultura, a su identidad, a su forma de interpretación de la realidad y de lo que más le convenía a su país y a su pueblo para tomar las decisiones, cosas poco comunes en el mundo contemporáneo y que desgraciadamente por nuestras tierras y por distintos sucesos históricos no pudimos llevar a cabo.

Hoy usted mencionaba que los usuarios, los argentinos, usan los confortables trenes que hemos adquirido, recientemente, en la República Popular China y tiene usted razón, allá por el año 49 los fabricábamos nosotros. Estos avatares nos impidieron seguir con este desarrollo, pero hoy no es hora de lamentar lo que no hemos hecho, lo que no nos han dejado hacer o nos han impedido hacer, es hora de valorar esta magnífica oportunidad, que tenemos en este mundo que vuelve a ser multipolar.

Y vuelve a ser multipolar – y no es porque este usted presente – en gran medida por el surgimiento de economías como la china, que permiten alternativas frente a un mundo que se creía agotado en un tipo de vinculación comercial. Ustedes han planteado otra realidad y otro mundo, y me atrevería a decir que en muy poco tiempo, si no es ya, van a ser la primera economía del mundo, que exhiben, además, con la República Argentina un gran grado de complementariedad.

Lo que hoy hemos firmado es la continuación y la perseverancia también, que inició el Presidente Kirchner, en el año 2004, con el entonces Presidente Xu Jintao, cuando firmaron el Acuerdo Estratégico, y que hoy usted y yo estamos profundizando.

Mañana más de 200 empresarios argentinos tendrán contacto con sus pares chinos, que lo han acompañado en su viaje, para poder realizar oportunidades de negocios

Se abre esto, oportunidades para los argentinos, además de obras de infraestructura, como las represas hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, un sueño que yo, que ustedes saben que no soy nacida en Santa Cruz, escuché por primera vez cuando fui a Santa Cruz en 1975. Ya, en ese momento, había décadas anteriores, donde se hablaba sobre el aprovechamiento hidroeléctrico de este caudaloso y portentoso río.

Hoy lo vamos a poder hacer realidad merced a la decisión del presidente Xi Jinping que cuando me entrevisté con él y lo invité a concurrir a nuestro país en la reunión de San Petersburgo del G-20, le dije que esto y el Belgrano Cargas eran 2 obras prioritarias y fuimos escuchados. No fue escuchada la Presidenta de Argentina, fuimos escuchados los argentinos, porque yo hablo en nombre de todos los argentinos cuando hablo con un jefe de Estado extranjero.

Y quiero agradecerle, precisamente, no solamente eso, sino los innumerables convenios que hemos firmado hoy.

Desde la usina de energía atómica CANDU, la cooperación; desde las barcazas para dragado por más de 400 millones de dólares; de la apertura del comercio y del mercado chino para peras, manzanas y carnes argentinas y por la decisión del Presidente también, de integrar el desarrollo industrial chino a la Argentina, ayudar a que la Argentina también se desarrolle más aún industrialmente, agregue valor, pueda exportar más a China y balancear aún más esa balanza comercial.

Por eso, hoy es un día fundacional. Usted dijo un proverbio, son famosos los proverbios chinos, recién cuando nos entrevistamos con los periodistas. Dijo que uno puede ir más adelante, pero varios llegan más lejos. Esa es la base de porque ustedes son hoy lo que son. No es solamente porque son 1.360 millones, hay otros países que también tienen gran cantidad de habitantes y no han alcanzado su gran desarrollo.

Creo que es también la preeminencia de la política la que decide, la que planifica, la que persiste, la que orienta, la que rectifica o ratifica los rumbos. Como usted explicaba cuando el Partido Comunista Chino, en su plenario del año 2012, decidió, en una primera etapa, con una primera meta para su pueblo, una vida razonablemente acomodada y para el año 2050 un pueblo próspero.

Eso es planificar, y lo digo porque yo sé que hay algunos que les produce un tanto de urticaria el tema de la planificación estatal.

Pero miren China, planificación estatal y articulación de lo público con lo privado, modernización para poder ser el gran país que hoy son.

No quiero olvidarme porque lo hice en la conferencia que tuvimos con los periodistas de unirme al deseo a la solicitud del señor presidente Xi Jinping, en cuanto a las condolencias a las víctimas del luctuoso hecho que se produjo con la caída del avión malayo y también unirme al deseo de una pronta y objetiva investigación que llegue a la verdad de los hechos. Repito cada una de las palabras que usted pronunció porque las comparto plenamente.

Finalmente, y para hacer honor, él nos felicitó por el Subcampeonato del Mundo, nos mencionó como el país del tango, quiero decirle que sé que este año es el año del Caballo, del Caballo de Madera en China. Mi hija es Caballo, en el horóscopo chino también, yo soy Serpiente, Kirchner era Tigre y mi hijo Máximo es Dragón. Mire usted la pléyade de animales que tiene la familia y que importantes, diferentes y complementarios somos.

Y en honor a este año del Caballo de Madera, es que queremos hacerle a usted y a su esposa, un obsequio. Por parte de la Asociación Argentina de Caballos de Polo y de la Asociación Argentina de Caballos de Silla, saben que ahora tenemos abierto también el mercado chino a la venta de caballos, no es que le regalamos una foto, le regalamos el caballo de verdad, lo que pasa es que no podíamos traerlo aquí adentro, así que, le regalamos para su esposa un caballo de silla, sabemos que a ambos les gusta cabalgar y, a usted, un típico caballo de polo argentino, los mejores del mundo, ambos son reproductores, sementales y están en perfectas condiciones para cabalgar.

Así que, en honor al año del Caballo, le damos este presente a usted y a su esposa. Muchas gracias.

Le agradecemos a ambas asociaciones este regalo y el ministerio de Agricultura y Ganadería como corresponde, se hará cargo del traslado. Muchísimas gracias por este obsequio.

Y ahora, sí, a brindar por el año del Caballo de Madera; a brindar por la Argentina; a brindar por la amistad con la República Popular China; a brindar por esta etapa fundacional y fundamentalmente, por el rol que ambos creemos en materia de un mundo más justo, más multipolar y más democráticos en sus relaciones.

¡Salud y a todos y a todas!

Gracias.