Comunicación telefónica de ayer con los artistas que presentaron «La Patria en textos y canciones».
Qué jornada la de hoy tan maravillosa. Estoy muy contenta. Apenas entrado el día parte de la Patria salió otra vez a las calles de Buenos Aires. Yo pensaba cuando veía las imágenes, tomó la forma de trabajadores, operarios, oficinistas, de gente suelta que también había, y las había de todas las edades. Y miraba los rostros, miraba los rostros por ahí de sangre inmigrante como nosotras que somos un poquito más blanquitas, otros de piel más oscura, esa piel que inexplicablemente aún provoca que algunos y algunas frunzan la nariz. No lo voy a poder entender nunca, somos un pueblo con apenas 200 años de historia y los que estaban antes la verdad tenían la piel más oscura, los dueños de la tierra, pero en fin, no quiero distraerlos.
Bueno. la Patria salió a la calle porque no tiene miedo, quiere futuro sobre todo, y como quiere futuro brota como el agua cada vez que la maltratan. Y hoy Rita sentí que surgía otra vez clara como el agua, pero con mucha alegría, aún en los malos momentos, porque la Patria no es violenta. Sería buenos que los que la maltratan, que los maltratadores de Patria y de la historia lo advirtieran y se dieran cuenta de una vez por todas que nuestro pueblo es manso y tranquilo pero no tonto. Ojo, manso y tranquilo pero no tonto. Y que sólo quiere que lo dejen trabajar en paz y que no le compliquen la vida. Hoy sentí eso. Y bueno, ahora estoy ahí con ustedes y apenas entrada la noche tenemos Patria pero esta vez en Avellaneda, en este queridísimo Teatro Roma. Pequeña gran maravilla que me encantaba visitar cada vez que iba allí. ¿Está por ahí Jorge? Una recomendación que voy a hacer nada más, espero que lo tenga tan lindo como siempre y más lindo cada vez. Me encanta. Hermoso, hermoso.
Vi el programa de ustedes y ahora te puedo decir que la Patria ahí en Avellaneda tomó forma de mujer, como no podía ser de otra forma. De mujer y de talento, de talento en los decires y en el callar, en el mirar y en el moverse, de talento en cantar y en encantar, el talento de nuestras actrices y nuestras cantoras. Yo digo cantoras a Liliana, a Marian, a Luciana, porque ¿sabés a quien le encantaba que le dijeran cantora?, a mi querida Mercedes Sosa. Ella cuando le preguntaban qué era decía que era cantora. Rita! Vi el programa y vi que vos también cantás, no te tenía en esa cantando, te tenía de actriz, te la debo como dijo alguien sobre la vida de otros… Ojo que también me encantan los que no son peronistas, que los necesitamos a todos.
Bueno vi el programa, vi que también cantás, no quiero entretenerlos mucho, quiero si agradecerle a vos Rita querida, a esa talentosísima Cristina Banegas que nos trajo un Emmy, a Graciela Dufau, a Maria Ibarreta, a Luciana Yuri la sobrina de mi querido y entrañable e inolvidable Leonardo Favio, por favor, único.
Un abrazo a Marian, mi querida cantora también. No quiero hablar más porque seguro están esperando las interpretaciones de ustedes y ojo que cuando hablo de interpretaciones lo hago en el más literal y expreso sentido de la palabra, porque interpretar no es sólo recitar o cantar, en realidad eso lo puede hacer cualquiera. Interpretar que es lo que hacen ustedes es darle vida a un texto, es transmitir sentimientos e ideas. Y que el otro, porque la Patria sigue y seguirá siendo el otro, sepa que hay alguien que quiere darle algo.
Ustedes esta noche le van a dar su talento a muchos otros. Sé que al final todas juntas van a interpretar La Cigarra, de Maria Elena Walsh, una de nuestras más queridas juglares, o juglaresas no se como se dice, bueno pero Maria Elena era un juglar. La Cigarra es la composición de ella que más me gusta, porque es como la Patria, muchos creyeron muchas veces que la mataban o la desaparecían, peor la Patria, terca y obstinadamente siempre aparece. Y aparece cantando como hoy durante el día por las calles de Buenos Aires, y como ahora por la noche con ustedes en el Teatro Roma de Avellaneda, asi que cuando canten La Cigarra piensen mucho en la Patria y piensen mucho en los otros y pónganle esa fuerza, ese talento y esa garra que sólo ustedes tienen. Juglares, actrices, cantoras de la Patria y del Pueblo.
Un beso grande para todas, para todos, un abrazo inmenso grande, los abrazo a través de este sur frío pero maravilloso. Quiero para despedirme saludarlos a todos y a todas de este sur que está muy frio pero que es maravilloso y del que alguna vez partimos con Néstor, para el norte. Nosotros los patagónicos cuando hablamos del norte no hablamos del norte del país, de Tilcara o la Puna, el norte es Buenos Aires y partimos al norte con nuestros sueños, nuestras esperanzas y nuestras ilusiones para construir junto a millones de argentinos un país mejor que el que nos había tocado a nosotros cuando éramos jóvenes. Y que estoy segura construimos, con dificultades, con aciertos y con errores, y que es lo que tenemos que cuidar, que defender para que todos puedan saber que otra vida y otro país no solamente es posible sino que también lo construímos.
Gracias, un beso grande, los quiero mucho y los extraño mucho. Gracias Rita, soy fuerte pero no tanto como parezco y necesito de la fuerza de todos.
