Mas años de escolaridad
La asistencia al nivel pre-escolar de los niños que reciben la AUH alcanza un porcentaje superior a la media urbana y se acerca a la plena cobertura. Para el nivel secundario, la tasa de asistencia supera el 90%, alcanzando valores por encima de la media nacional.
Controles de salud para todos y todas
El 94,2% de estos niños, niñas y adolescentes se realizan los controles sanitarios previstos y el 100% de las madres realizaron los controles médicos de los recién nacidos antes del mes de vida. El 99,9% de las mujeres con hijos menores de DOS (2) años, realizaron controles durante su último embarazo.
Aporte sustancial al ingreso familiar, mejora en alimentación saludable
La AUH presenta una importante proporción del ingreso familiar, llegando al 40% entre los hogares más vulnerables. Los ingresos que la familia percibe por asignaciones familiares permiten aumentar y diversificar los alimentos que se consumen, especialmente en rubros prioritarios relacionados con la alimentación básica y saludable.
Ayuda para la inserción laboral
Está comprobado que los titulares de la AUH buscan trabajo con mayor intensidad que el resto de las familias, o sea lo opuesto a los que dicen que con estas políticas sociales se “mantiene vagos”.
Se empodera la mujer
La percepción de esta prestación en forma mayoritaria por parte de la mujer la ha
empoderado, otorgándole mayor autonomía en la administración del ingreso.
Se rompe con la reproducción de la pobreza
– Las titulares de la AUH perciben que su situación actual es mejor a la de su hogar de origen.
– Seis de cada diez titulares han accedido en mayor medida que sus padres a la
educación.
– Entre los hogares receptores de la AUH, los hijos superan el nivel educativo de sus padres: un tercio de los adolescentes consigue una movilidad educacional ascendente respecto a la titular de la prestación.